La cotidianeidad se puede hacer literatura. Intento hacerlo. No prometo buen resultado.
viernes, 8 de septiembre de 2017
EL MUNDO INACABADO
Siempre nos enseñaron en la escuela que el mundo es redondo, y que en los tiempos antiguos se creía que el mundo tenía límites porque era cuadrado. Nos decían que tenían miedo de aventurarse a los océanos. La física y la astronomía se encargaron de demostrar que el mundo es redondo.
De todas formas, y como siempre, el lenguaje es un gran limitante para el ser humano. Lo que llamamos ‘’el mundo’’ en realidad es ‘’la tierra’’. Un planeta de los tantos miles de miles de millones que existen en este universo.
¿Hay otros?
‘’El mundo’’, lo que llamamos mundo, es donde transcurre nuestra existencia. El espacio físico y mental donde nosotros vivimos. Nuestra casa, nuestra ciudad, las amistades, la familia, los extraños que nos rodean. Ese es nuestro mundo. Ese es ‘’el mundo’’.
Con esta concepción, el mundo es limitado e inacabado. El mundo es un cuadrado inacabado, con 3 lados y medio que funcionan como barreras para nuestra existencia. La primera y más importante es el tiempo. El ser humano es finito. El cuerpo de cada individuo se degrada hasta el punto de dejar de funcionar, por ende, por más que sea un anhelo de nuestra especie, en una vida terrenal no podemos alcanzar un conocimiento pleno de lo que nos rodea, y lo que no.
Otro límite de ese mundo cuadrado es nuestro miedos, nuestras dudas, nuestra incapacidad de ver más allá de eso que hace que nos consideremos menos de lo que en realidad somos. El propio ser humano, individual o colectivamente es su límite.
El tercer y último lado y medio es la sociedad. Las construcciones que sostienen toda la estructura sistemática del ser humano son las que nos limitan en pos de seguridad y tranquilidad. Ya sea por religión, por condición sexual, por color de piel, por maneras de pensar y por todo lo que se cruce por nuestra cabeza, la sociedad nos pone un freno a nuestra capacidad de cruzar las barreras.
3 lados y medio.¿ Y el medio que falta? Es el espacio por el cual podemos escaparnos de toda esta locura en la que estamos arrojados, diría Heidegger. El medio lado que falta es el callejón de salida, la puerta de emergencia por la que podemos encontrar lo que hay por fuera del cuadrado. Es nuestro salvoconducto, la rendija por la que nuestra razón y el cuerpo intentan descubrir lo que las barreras no dejan. Ese ‘’medio lado’’ representa un riesgo, ya que dentro de los límites estamos seguros y tranquilos, las estructuras nos contienen. Por fuera de eso, es el abismo.
¿Caemos?
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