MATE MAÑANERO

No hay nada como desayunar con mate ¿ Dulce o amargo? Y, el mate es amargo. El dulce es respetable, pero EL MATE es amargo. Ya antes de tomar un mate nos invade una sensación de relajación. El solo hecho de tomar mate trae un momento de goce y tranquilidad. Prender la hornalla, poner agua en la pava y poner ésta en el fuego. Preparar la yerba ¡Dios bendito si no hay yerba! Yo creo que una de las frustraciones mundanas mas grandes es tener ganas de matear y que no haya yerba. Por suerte, yo siempre tengo,así que limpio el mate y lo llevo a la mesa a la espera de que se caliente el agua. Son las 7.15 am. Afuera el frío se estampa contra los vidrios de la ventana. El termómetro del celular, hoy mas usado que los termómetros de mercurio, marca 1°. El solo hecho de ver eso trae escalofríos en la espalda. ¿Falta mucho para el agua? Hay que matar el tiempo. Leo el apunte. No me puedo concentrar, escucho el sonido del fuego. Cambia. El agua está por hervir. Es el momento de apagar la hornalla y echar el agua en el termo multicolor que le empieza a poner alegría a la madrugada. El agua está en el termo. Inclino el mate a 45° y echo la yerba cuidadosamente, armando la pared para que el mate no se lave rápido. Solo yerba. Me siento a la mesa y lleno el mate de agua. Tomo el primero. La mañana ya cambió. El dia cambió.

TARDE DE INVIERNO

Un leve escalofrío en el cuello fue lo que lo despertó. Llegó a las 7 de la madrugada Casa de Piedra, un conocido nightclub de la Ciudad. Tomó unas copas de más tanto antes como en el lugar, pero no se alcoholizó. Escalofrío en el cuello y congestión nasal. Así se despertó. Miró la hora. El celular marcaba las 12. No tenía resaca, pero estaba aturdido. Se levantó y fue al baño.El piso helado y el aire frío pegando en sus pies y torso desnudos, mas el agua helada de la canilla terminaron por despabilarlo. Su madre lo invitó a comer y como no tiene nada en su casa, acepta, pero no lo pueden buscar, asi que decide ir en su bici. No tiene campera gruesa porque su abuela, que vive al lado de su madre, la arregló pero no la devolvió. Decide enfrentar el frío e ir en buzo, nada más. Volverá con la campera. Se preparó, bajó la bicicleta por las escaleras y abrió la puerta. Día nublado y semi ventoso. El problema era la temperatura del aire. Polar. Dudó por un instante pero juntó fuerzas y empezó a pedalear. A medida que avanzaba por las calles desiertas se le entumecían las manos y el frío se colaba por su cuello hasta su espalda.'' Tengo que pedalear y no pensar'' se dijo. El trayecto es largo y el cuerpo se tiene que calentar. Piensa en su vida. Se vió pedaleando en el frío, solo. Invierno.

Tatuaje

Siempre quiso hacerse un tatuaje, pero algo le decía que iba a doler. Siempre fue reacio a las agujas. No les temía ni le impresionaban, simplemente no le gustaban. 2 años atrás se había decidido a escribirse la piel con la frase '' Libertad, Igualdad, Fraternidad'', los principios que guiaron la Revolución Francesa, ese extraordinario movimiento que terminó con el absolutismo monárquico y sentó las bases de la democracia moderna. Como decía, decidió tatuarse, fue al lugar y sacó turno. El día esperado, se '' apichonó'', pensó que no era el momento, así que nunca fue. Hoy, después de aquella NO experiencia y decidido a no repetirla, se levantó de la cama determinado a hacerse un tatuaje. Primer problema: ¿ Qué hacerse? Consultando con todo el mundo, hasta con una ex novia, recibió siempre la misma respuesta , '' hacete algo que te represente''. Segundo problema: Muchas cosas lo representan. Es hincha de Independiente, es Peronista, le gusta el fútbol, la música, la política, en fin, muchas cosas, pero ninguna como para tatuarse para toda la vida. Iba camino a repetir lo de 2 años atrás, pero recordó la fecha. Aniversario de la Revolución Francesa. '' Libertad, Igualdad, Fraternidad''. No lo dudó. Fue al cajero, sacó el dinero, agarró su bici y puso rumbo al lugar. Cerrado ¿ Y ahora? Hay solución. Se va hasta la oficina donde trabaja a adelantar las tareas de la tarde así puede salir después. Lo hace. Cuando llega su jefe, está todo terminado, y así vuelve a la carga. Pedalea con fuerza, ata la bici con un poste y entra. No saldrá de allí sin un tatuaje. ''En 15 minutos'' le dice el tatuador. Listo. Cuando terminó con el cliente anterior, armaron el diseño con letra y todo. Desde cero. Esperó 5 minutos y pasó al cubículo. Le pegaron el diseño y antes de acostarse en la camilla preguntó: '' Decime la verdad ¿Duele?'' , el tatuador lo mira y dice ''Quedate tranquilo, no duele''. Alivio. Se acostó, y el muchacho comenzó el trabajo. Efectivamente , no mintió. No duele. De ahora en más, llevará el lema francés toda su vida. Orgullo y felicidad.

Reflexiones de un viaje en colectivo

Viajar en colectivo a la noche es uno de los momentos de mayor reflexión de una persona. No, no exagero. El llamado inconsciente colectivo suele encasillar acciones de la vida cotidiana que nos generan un prejuicio y cuando nos toca llevarlas acabo,actuamos en consecuencia sin ver que en esas situaciones podemos llegar a tener revelaciones que no podríamos tener en otro ámbito. Volviendo a las primeras palabras de este texto, lo usual es que uno se prepare mentalmente para viajar porque " es aburrido" . Mentira. Viajar en colectivo es aburrido porque lo tenemos incorporado, pero no debería serlo. Ya el hecho de viajar es liberador, lo que invita al pensamiento reflexivo, sino ¿ por qué se nos dice que para encontrarse lo mejor es viajar? Ya eso es una contradicción social, mínimo. El paisaje es otro factor que influye mucho. Toda visión por la ventanilla tiene su encanto. Las sierras, los campos de la pampa húmeda, los desiertos patagónicos para luego darle lugar a las majestuosas cordilleras, los colores del norte y tanto mas, todos salpicados por la luz de la luna natural, o alguna luz artificial pérdida allá a los lejos. Cada uno aporta su belleza a los ojos del viajero. La oscuridad, el sonido monótono del motor y la falta de distracción humana también suman para que la mente de cada uno empiece esa cadena de pensamiento que incluye diálogos imaginarios con gente a quien muy probablemente nunca hayamos escuchado su voz, el partido que se jugo, el asado que se come con la flia y amigos, la chica que nos negó un beso y tantas y tantas cosas se mezclan en la cabeza, hasta que cuando caes en la realidad, el viaje llega a su fin.

Estampida invernal

19:58. 2 minutos para terminar la jornada laboral. El trabajo es interesante, lindo y cómodo, sobre todo a la tarde porque permanece la mayoría del tiempo en la oficina. ¿ Es el trabajo que quiere para toda su vida? En principio no, pero le tomó el gusto, y la verdad es que lo está pensando. Ademas, por las dudas, se está capacitando en el área para hacerlo mejor. Nunca se sabe. 20:00. Terminó la jornada, al fin. Apaga la PC y acomoda los papeles para la semana siguiente. Afuera ya es de noche y recuerda que tiene que comprar la comida y dentífrico. Se pone el saquito y la bufanda tricolor azul franca, azul y celeste, representativos de un candidato a quien votó y en quien confía. Saca la bicicleta, y lo embiste un frío penetrante. No hacía tanto frío. ¿ En que momento se vino el frío? Ya no sabe si está hablando del clima o de él mismo. No tiene guantes ni gorro. Podría caminar , pero decide pedalear para calentarse. Arranca, y enseguida se da cuenta que el trayecto hasta su casa es muy cortó, y su cuerpo no va a adaptarse al frío. Las manos se entumecen y la cara se congela. El trayecto se hace eterno, pero llega a su casa. No encuentra la llave. Las manos siguen frías. Decide golpear. Sabe que su hermano esta en la casa porque se vió con una chica. Siente los pasos en los escalones. Abre la puerta. Lo ve helado y lo ayuda con la bicicleta. Sube, y lo primero que hace es preparar el mate. Lo más parecido a un hogar. La próxima vez tendrá más cuidado.

Soledad

Viernes feriado. Es viernes, si, pero con aroma a sábado. Despertarse y mirar la hora. El celular apoyado en la mesita de luz blanca dice que son 11.30 am. Hoy por hoy, el celular es más usado que los relojes para revisar la hora. 11.35 am, a levantarse. A lo lejos, Nitzcha, la gata, pide comida. Alimenta a la gata. Ir al baño, lavarse los dientes y la cara, volver a la pieza y vestirse. Hoy hay que comprar un pantalón. Bajar las escaleras con la bici recién comprada y comienza a pedalear. Llega al negocio de ropa. Lo atiende un joven, bastante mal. ''Es nuevo seguro''. No pasa nada. Ver el pantalón, lo mide y queda justo. Hay que comprarlo. Pedalear hasta la casa y subir la bici. Es mediodía, primera duda del día: ¿Desayunar o almorzar? Son mas de las 12, almorzar es lo mas sensato ¿ Para quien? Nadie ve. Malditas normas sociales. Hay fideos, hay crema y hay queso rallado, así que la decisión es rápida. Mientras se hacen, la televisión mata el tiempo. No hay nada. El canal de investigación policial es buena opción aunque todos los programas son iguales. Un muerto, investigación, culpable. Los policías siempre ganan. Almorzar. Los fideos se pegaron pero están sabrosos. Saciado. Hay que lavar los platos de hoy y los de la noche anterior. Listo. El canal sigue con sus programas de investigación. Los policías siguen ganando. Apagar la televisión ¿ Mates? Si. Calentar el agua en la pava y preparar el mate. Amargo, por supuesto. El agua está a punto. Primer mate, el más feo siempre. Estudiar, aunque falte mucho para el final. En algún momento hay que empezar. Así se pasa la tarde hasta la hora de la cena. Hablar solo con los pensamientos propios.

Lazos

Todo comenzó con una foto. Ella subió su foto a una red social, ese extraordinario fenómeno de los días que corren. Estaba sonriendo, y su sonrisa es hermosa, ilumina. A él, le gusta mucho esa chica pero se resignó pacientemente a no tenerla, incluso se lo dijo. Se había apartado, aunque nunca dejó de pensar en ella. Esa mañana vió la foto y decidió escribirle. Ella respondió, y comenzaron a hablar como tantas veces en el pasado. El leyó la palabra "soltar", sintió algo especial en su interior y se animó a preguntar : " Qué quieres soltar?" Ella le contó lo que pensaba y sentía. Él no dudo. - Tatuatelo , le dijo. - Me acompañas? Pregunto ella. - Por supuesto respondió él. No había vuelta atrás.

La vida del hombre medio moderno

Suena el despertador. A veces los sueños se recuerdan, otras no. Se levanta, medio confundido, medio mareado, en definitiva , dormido. Hay que levantarse. ¿ por que? Porque hay que hacerlo. Sin preguntas. Hay que hacerlo. Hay que ir al baño, ducharse, lavarse la cara, los dientes y peinarse, todo para estar presentable ante la sociedad. Hay que vestirse lo mejor posible. Por que? Porque hay que hacerlo. Sin preguntas. "Que pasa si quiero ponerme rop ... " Sin preguntas. Hay que desayunar. Rápido, lento, poco mucho, en casa o en el trabajo. ¿ En que consiste el trabajo? En realizar la misma actividad todos los días hasta jubilarse. Con suerte, los últimos años podrás llegar a tener algún ascenso. Quien sabe. Almuerzo, casi siempre en el trabajo. Pocos afortunados pueden volver a su casa un rato. Fin del almuerzo, volver al trabajo. ¿ que era? Hacer la misma actividad durante años. Si, eso era. ¿ y para que hay que trabajar? Para obtener dinero. El gran ordenador de la modernidad. Darse gustos, pagar impuestos, entre otras cosas se hacen con dinero. Sin dinero no hay orden. Sin dinero no hay existencia. Fin del trabajo. Vuelta a casa. Pequeño descanso, cena. Cenar viendo televisión , si el dinero alcanza para tenerla. Esta la opción de internet, pero también vuelve a aparecer el dinero. Ducha, o no, cama y dormir. Que se puede recordar de este día? Suena el despertador ...